SALCEDO.- Pese a que desde tempranas horas de la tarde de ayer, habría corrido la noticia de que la joven Luz del Alba Brito Peralta había fallecido, los informes dan cuenta que la misma permanece conectada a unos ventiladores que la mantienen “con vida”.
Así lo confirmó un familiar cercano a la dama, quien manifestó que pese a que próximo a las 2:00 de la tarde, los médicos la habían declarado “muerta,” sin embargo, media hora más tarde se descartó esta posibilidad, ya que cuando la misma la “iban a preparar” para ser entregada a sus familiares, mostró algún tipo de movimiento por lo que los médicos que la atendieron durante la cirugía decidieron conectarla para “ver lo que pasa”.
Brito Peralta, de 32 años de edad, recibió un disparo de su ex esposo, el joven Jardy de la Cruz Santos de 22 años de edad, con entrada y sin salida, el cual se le alojó en la parte media del tórax, por lo que tuvo que ser intervenida quirúrgicamente en el Hospital Provincial Pascasio Toribio Piantini de esta ciudad, donde los médicos aseguraron que se estado es “de gravedad”.
El lamentable hecho sucedió en el interior de la discoteca “Punto G” de esta ciudad de Salcedo.
Debido a su delicado estado de salud, la mujer tuvo que ser trasladada al Hospital Regional José María Cabral y Báez de Santiago, donde se le practicó otra cirugía, allí tuvieron que transfundirle cinco pintas de sangre, por las múltiples heridas que tenía en el interior de su estómago.
Jardy es llevado de emergencia al hospital. Sin embargo, entrada la noche de este lunes, y de manera sorpresiva, el agresor Jardy de la Cruz tuvo tuvo que ser llevado de emergencia al Hospital de esta ciudad, ya que estando en su cerda, presentó un fuerte dolor en el pecho.
El imputado fue diagnosticado con taquicardia supra ventricular, por lo que fue llevado al hospital Sam Vicente de Paúl, en San Francisco de Macorís.
De acuerdo a un especialista en este tipo de enfermedad, la misma es producida por las tensiones, las fuertes presiones y una aguda ansiedad en el individuo.
Para entregarse, Cruz Santos se hizo acompañar del abogado Robert Regalado así como del sargento de la Policía adscrito a la Oficina de Atención a la Victima, el Sargento Jesús Javier Brugos.
Ambos tienen un niño de cuatro años. De acuerdo a las versiones dadas por los familiares de estos, la pareja tenía un promedio de cuatro años separados, debido a los problemas intrafamiliares, y por ello, un fiscal de la oficina de protección a la víctima le entregó a ambos un documento como medida de alejamiento.
Sin embargo, y a pesar de que la medida reposaba en dicho estamento, estos mantenían una relación que era de conocimiento público, y las agresiones y los pleitos entre ambos continuaban.
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